Recientemente me tropecé con una breve pero interesantísima animación de la gente de Future of Storytelling en el que Maria Popova, fundadora y editora del celebre blog Brain Pickings, comparte su idea sobre el valor que los contadores de historias tienen en el mundo hoy. Tan interesante me pareció, que decidí traducir y subtitular el video, para compartirlo acá.
Su idea es sencilla: más información no necesariamente conduce a mejor entendimiento y mucho menos a la obtención de sabiduría. Por el contrario, puede ir detrimento de éstas, pues la abundancia de información puede llevar a una “ilusión” de comprensión. Ahí es, justamente, donde Popova entiende que está el valor de los narradores, independientemente del origen o naturaleza que tengan (periodistas, cineastas, etc), pues son estos “contadores de historias” quienes nos ayudan a discriminar lo que tiene valor de aquello que no lo tiene, y más importante, nos ayudan a comprender la razón de ese valor.
Si tuviera que sintetizar su mensaje diría que leer bien nos ayuda a poner las ideas en orden, nos abre caminos o posibilidades de análisis que de otra forma no consideraríamos. Pero fundamentalmente, nos da puntos de vista, razones, con las que podemos o no estar de acuerdo, pero que en última instancia, nos sirven para construir nuestra propia interpretación del mundo y de lo que nos pasa en él. La verdadera lectura es aquella que trasciende lo meramente anecdótico o informativo para confrontarnos con visiones alternativas del mundo (cualquier mundo, el personal, el social, el laboral, etc), obligándonos a tomar una posición.
Leer mucho no es suficiente. Hay que leer mejor.
!Excelente! me preocupa mucho este tema porque con el avance de las redes sociales y la profusión imparable de información el común de la gente tiende a tener una cantidad de confusiones derivadas de la imposibilidad de retener todo lo que lee, llevándonos a indiferenciar teorías, argumentos, personajes y hasta valores.
Hola Rosa querida. Disculpa que recién responda. No había visto tu comentario.
Comparto tu preocupación, pero creo que soy mucho más optimista que pesimista en cuanto al efecto que las tecnologías digitales tienen en la formación de opiniones calificadas. Te pongo un ejemplo propio: leer en Kindle. Para mi, leer ahora se ha vuelto toda una experiencia multimedia que, lejos de entorpecer la lectura, la ha enriquecido. El solo hecho de tener un diccionario y un traductor, ambos en la punta del dedo, es algo que ha transformado mi experiencia enormemente. Lo mismo ha sido la posibilidad de acceder, con apenas dos “clicks” a nuevos autores y nuevos temas, a un costo realmente bajo en tiempo y en dinero. Hoy lee muchísimo más, pero también leo mucho de lo que hace apenas 15 años hubiese sido difícil conocer o acceder.
Ahora bien, lo que hay que hacer es aprender a leer mejor. En un mundo con tanta información tan al alcance de cualquiera, se hace imperativo que sepamos discriminar y que leamos con ojos más críticos. No hay que tomar lo primero que se lee como una verdad, sino que hay que ir confrontando ideas, buscando alternativas y desafiando nuestras propias creencias. El que sepa hacerlo, en este mundo hiper-conectado, logrará enormes beneficios.
¡¡Abrazo grande y gracias por siempre pasar a leer!!
Felicitaciones por tan buena información, gracias por compartirla, aun soy un novato en la lectura, no era muy asiduo a leer, pero mi enamorada ahora esposa influyo mucho en que tomara la lectura diaria en un habito, y por cierto disfruto en mucho.
¡Qué bueno que te guste, Héctor! ¡Y qué bueno que estés leyendo! Es uno de los grandes placeres que existen, para quienes saben apreciarlo. Abrazo